Rioverde.- Por fin descansa en paz el cuerpo del habitante del ejido Puente del Carmen, Ciudad Fernández, el cual fue entregado sin órganos, relleno de aserrín y con trapos de sangre; la familia pudo recuperar los órganos faltantes y darles cristiana sepultura.
MACABRA NEGLIGENCIA
El pasado 31 de enero del presente año, fue denunciado un saqueo de órganos por parte de la funeraria del IMSS de la capital potosina, ya que entregó incompleto los restos de una persona se nombre Genovevo, investigación que aún está en curso.
La persona había falleció el 27 de noviembre del año pasado en hospital del IMSS de la capital potosina y el cuerpo fue entregado el 28 de noviembre, pero al hacer el cambio de ataúd se detectó que le faltaban restos, además de encontrar en los pies del cadáver una bolsa negra que contenía 2 troncos de lengua, dos corazones y dos masas encefálicas, las cuales fueron trasladadas a la Procuraduría para realizar un estudio de ADN y saber a quién pertenecían.
Su familiar, Magaly Aparicio Solano quien interpuso la denuncia, el pasado sábado fue citada en la Subprocuraduría de la Zona Media para recibir los órganos restantes, los cuales fueron llevados a la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen del ejido Puente del Carmen, donde el párroco Elías Rangel los bendijo, y posteriormente fueron llevados al cementerio para depositarlos junto al cuerpo.
Terminó el duelo
“Para mí fue algo importante recuperar los órganos de mi suegro, para dar certeza de que el cuerpo está completo”, dijo Magaly Aparicio, por lo que ya se dio por terminado el duelo que por más de dos meses y medio se estaba viviendo.
“Resulta que los restos humanos de mi suegro, estaban en la bolsa negra que venían en el ataúd, lo cual fue confirmado con estudio de ADN, sin embargo, se desconoce aún a quien pertenecen las otras partes, que son un corazón, un tronco de lengua y dos masas encefálicas, se está a la espera de que alguien los reclame, porque es triste que se vayan a una fosa común”.
Agradeció el apoyo a PULSO por haberla ayudado en su caso, al igual que a las autoridades de la Subprocuraduría de Justicia, “por fin se dio por terminado esto, es algo que nos tenía intranquilos, el cuerpo no estaba completo como debe ser”.
Exigió a las autoridades del IMSS tener más cuidado con el personal que se encarga de realizar el embalsamiento, “un cuerpo merece un trato digno y respeto, no lo que hicieron con mi suegro y con los otros dos cuerpos a los que les quitaron los órganos”.
