Madrid.- El Museo Picasso Málaga inicia su ciclo expositivo de 2019 con la muestra “Olga Picasso”, en la que a través de cuadros y otros objetos realiza un recorrido por la vida y la influencia que tuvo Olga Khokhlova, primera esposa del creador del cubismo.
La exposición, surgida gracias a una serie de cartas y fotografías encontradas en el baúl de viaje de Olga, quien fuera bailarina de la reconocida compañía Ballets Rusos, exhibe los años que compartieron como pareja y pone en perspectiva algunos de los cuadros más importantes de Pablo Picasso.
Del 26 de febrero al 2 de junio del año en curso se podrá conocer que Olga Khokhlova nació en 1891 en Ucrania, siendo hija de un coronel de la armada imperial rusa y que en 1911 se incorporó a los Ballets Rusos, la innovadora compañía de danza que triunfo en Europa a inicios del siglo XX bajo la dirección de Serguei Diaghilev.
Se conocieron en 1917, en Roma, cuando Pablo Picasso realizaba los decorados y el vestuario del ballet “Parade” y un año después se casaron, naciendo su único hijo, Paulo, en febrero de 1921, de acuerdo con información del propio recinto museístico. La pareja se separó en 1935; sin embargo, permaneció casada hasta la muerte de ella, en 1955 en Cannes, Francia.
MODELO DEL PINTOR
Desde sus primeros momentos, Olga se convirtió en la modelo predilecta de Picasso, siendo la imagen femenina más representada por él desde finales de la década de 1910, ocupando un lugar preferente a inicios del siguiente decenio, mostrando su belleza de diversas maneras y poses.
El baúl del cual surgió la muestra contenía cartas y sobres con fotografías que permitieron recrear la historia personal y artística de la pareja, en el marco de la época que les tocó vivir. Es decir, exhibe su vida en común, sus viajes y los talleres donde trabajaba el maestro manchego.