Miles de personas quedaron hoy sin electricidad en áreas costeras de Texas mientras se esperan grandes inundaciones en la región los próximos días tras el paso de «Harvey», degradado hoy a tormenta tropical luego de haber sido considerado el mayor huracán en 12 años en afectar Estados Unidos.
Una persona murió en la ciudad de Rockport, en el Golfo de México, una de las más afectadas por el fenómeno, mientras que cerca de 300.000 personas se quedaron sin suministro eléctrico en el área, informaron autoridades del estado.
El centro de la tormenta se movió a 95 kilómetros al sudeste de la ciudad de San Antonio, con vientos máximos de 110 kilómetros por hora, informó el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
Cerca de 1.300 efectivos militares participan en tareas de rescate y asistencia, informó el gobernador del estado, Greg Abbott. Otros 500 soldados serán enviados a las áreas afectadas.
Brock Long, director de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), dijo que se estaban realizando tareas de búsqueda y rescate. También se dispusieron refugios, servicios médicos y generadores de electricidad, además de agua y comida.
«Harvey» tocó tierra el viernes como huracán de categoría 4 -el primero en 12 años de esa envergadura- y se había degradado a categoría 1 a lo largo del día.
Las lluvias torrenciales cayeron sobre el estado del sudoeste del país luego de que el huracán, que alcanzó la categoría 4 de un máximo de 5, tocara tierra el viernes 50 kilómetros al noreste de la localidad de Corpus Christi.
«Harvey» fue recategorizado hoy como tormenta tropical, pero las alertas continúan activas en áreas del interior del estado cerca del centro de la tormenta, precisó el CNH a las 10 am (1500 GMT).
Pese a que «Harvey» fue perdiendo potencia, los meteorólogos alertan de la subida del nivel de las aguas por las lluvias torrenciales y los vientos huracanados en los próximos días.
Por el momento se desconoce el alcance de los daños, indicó CNN, pero es de esperar que algunas zonas «estén inhabitables durante semanas o meses», citó la emisora a expertos.
El gobernador del estado alertó del peligro de «un desastre de grandes proporciones».
«Harvey» entró por la zona norte de la isla de San José, unos seis kilómetros al este de Rockport, en torno a las 22:00 horas del viernes (03:00 GMT del sábado).
Se espera que el huracán recorra el sudeste de Texas durante los próximos días. El CNH decretó una alerta por huracán entre Port Mansfield y Sargent, ambas en Texas y a una distancia de unos 560 kilómetros, donde viven unos 16 millones de personas.
«Se prevén inundaciones catastróficas debido a las fuertes lluvias y el oleaje», alertó el CNH, que estima que la subida del mar podría generar olas de hasta cuatro metros.
«‘Harvey’ trae lluvias torrenciales y un peligroso oleaje que crean una situación de inundaciones que pueden provocar muertes. A ello se suman los daños de los vientos huracanados», señaló el CNH.
Los expertos lanzaron numerosas alertas para la región, en la que los fuertes vientos podrían causar daños similares a los de un tornado.
El huracán era esperado como uno de los peores en el área en los últimos 12 años y la primera catástrofe natural de grandes proporciones a la que se enfrente la Administración del presidente Donald Trump.
Abbott urgió a todos los que viven en zonas bajas a evacuar sus casas y dijo temer que la gente quede varada por las inundaciones sin comida, electricidad ni agua.
En algunas zonas se decretaron órdenes de evacuación obligatoria y Trump declaró a la región oficialmente como zona de catástrofe para poder liberar fondos de asistencia. «¡A pedido del gobernador de Texas he firmado la Proclamación de Desastre, que libera toda la fuerza de la ayuda gubernamental!», escribió Trump en Twitter.
Las previsiones meteorológicas señalan que «Harvey» permanecerá en tierra durante el fin de semana y hará que llueva en la franja sudeste durante días. Se esperan acumulaciones pluviales de entre 38 y 63 centímetros.