BUENOS AIRES (AP) — El gobierno argentino citará al embajador de Estados Unidos ante la «falta de respuesta» al reclamo de información sobre el paradero del ex espía Antonio Stiuso, sospechoso de haber cometido irregularidades en la investigación del atentado a un centro judío en Buenos Aires.
Así lo anunció el miércoles Oscar Parrilli, titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), quien dijo a varios medios de prensa que la actitud de Estados Unidos es de «protección» del antiguo jefe de contrainteligencia de los servicios secretos, quien según el gobierno está radicado desde hace meses en Florida.
«Se va a estar citando en los próximos momentos, hoy o mañana, al embajador en Argentina, Noah Mamet, por parte de la Cancillería ante la absoluta falta de respuesta y de alguna manera, la complicidad con esta situación», puntualizó Parrilli a Radio América.
Parrilli acusó a Stiuso de no haber colaborado con los responsables de la pesquisa del atentado en 1994 a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), quienes reemplazaron en la tarea al fiscal Alberto Nisman, hallado muerto el 18 de enero en su departamento de Buenos Aires en extrañas circunstancias. «Evitó que se investigaran pistas…Él sabe algo que no lo dice», afirmó el funcionario a la Radio Uno.
Además recordó que en los últimos meses Stiuso ha sido denunciado penalmente por presunto «encubrimiento» en la investigación del atentado, lavado dinero, contrabando y enriquecimiento ilícito. Pero admitió que tiene paradero desconocido y «no es prófugo» ya que no hay hasta ahora ningún pedido de detención en su contra por parte de la justicia argentina.
The Associated Press se contactó con la embajada estadounidense para pedir comentarios sin haber obtenido respuesta por ahora. Lo mismo hizo con el abogado de Stiuso, Santiago Blanco Bermúdez, que no contestó al requerimiento.
La propia presidenta Cristina Fernández reclamó colaboración a Estados Unidos para dar con el paradero del ex espía en una entrevista al canal C5N que fue difundida la víspera.
Desde que se produjo el atentado contra la AMIA, Stiuso participó en la investigación y asesoró a Nisman, quien responsabilizó a Irán del hecho, que causó 85 muertos. El estado iraní niega las acusaciones.
Según la presidenta, Stiuso fue el que «manejaba» a Nisman y lo proveía de información, aparentemente de servicios extranjeros. El fiscal fue hallado muerto pocos días después de presentar una denuncia contra Fernández como ideóloga de un supuesto plan de encubrimiento de los ex funcionarios y ex diplomáticos iraníes acusados del ataque. Esa denuncia ha sido desestimada por la justicia.
Después de la muerte del fiscal, la presidenta tendió un manto de sospecha sobre Stiuso dando a entender que este último, expulsado de los servicios de inteligencia a fines de 2014, proveía de información falsa a Nisman y está detrás de la muerte del investigador.
La cancillería argentina señaló por su parte que Stiuso está obligado por ley a presentarse cada vez que sea citado por las autoridades de inteligencia y ha violado dicha obligación. También indicó que la justicia argentina ha enviado 8 exhortos a Estados Unidos para que explique cuál es el paradero del ex espía sin que hasta el momento haya recibido la información requerida.