MILWAUKEE, Wisconsin, EE.UU. (AP) — Hablando ante seguidores de su partido, el presidente Barack Obama calificó el martes al gobernador republicano Scott Walker de político caduco que ha hecho retroceder la economía de Wisconsin, en momentos que está embarcado en una campaña de toda una semana a favor de candidatos demócratas en las elecciones legislativas del 4 de noviembre.
En un gimnasio lleno, Obama dijo que Mary Burke, candidata demócrata a la gobernación del estado, es una destacada empresaria que luchara por el tipo de oportunidad de clase media que hizo posible el éxito de sus propios negocios. Aunque los demócratas esperaban que la presentación de Obama con Burke la ayudaría en la reñida contienda de la próxima semana, los republicanos pronostican con seguridad que Obama tendría el efecto contrario.
Hablando sobre los servicios médicos, el salario mínimo y asuntos de las mujeres, Obama no hizo referencia directa a Walker, sino que acusó a los republicanos de impulsar políticas anticuadas y fallidas, como la oposición a una ley de pago igualitario a hombres y mujeres respaldada por los demócratas.
«No tiene sentido», dijo el presidente.
«Necesitamos fortalecer a la clase media para el siglo XXI. Eso significa que necesitamos líderes del siglo XXI que realmente crean que las mujeres deben recibir igual salario que los hombres», dijo Obama, que entonces fue ovacionado.
Derrotar a Walker, un potencial candidato a la presidencia en 2016 y némesis de los sindicatos laborales, sería una hazaña para los demócratas que podría ayudar a impulsar el estado de ánimo del partido en una época escabrosa. Los demócratas no se han recuperado del fracaso en sus esfuerzos de revocar el mandato de Walker en 2012. Este año las encuestas muestran un empate técnico entre Walker y Burke, con pocos votantes indecisos.
«Los ojos del país están sobre nosotros», dijo Burke al presentar a Obama.
La presencia de Obama en las campañas electorales ha sido poco frecuente este año —la primera fue hace poco más de una semana— debido mayormente a bajos índices de aprobación que lo convierten en un potencial pasivo para los demócratas.
Incluso el escenario del mitin con Obama —en una escuela secundaria en una parte de Milwaukee con mayoría negra— sirvió de recordatorio al limitado atractivo de que goza el mandatario, tanto en la geografía como en la demografía del país.
