Un revés es el que recibió la noche de este lunes el gobierno argentino cuando en las Islas Malvinas comenzaron a abrirse las urnas del referéndum en el que los isleños decidieron su estatus político.
El 98.8 por ciento de los malvinenses optaron por mantener la actual soberanía británica, según el resultado de la consulta divulgado.
El gobierno de las Malvinas convocó a este plebiscito, que tuvo una participación del 92 por ciento, en respuesta a la reclamación territorial de Argentina, que presiona al Reino Unido a iniciar un proceso de negociación para resolver la disputa territorial de las islas del Atlántico Sur.
El esperado resultado, es la respuesta de los isleños a la catarata de errores diplomáticos que los sucesivos gobiernos argentinos vienen acumulando con respecto a las Malvinas. Desde el gobierno de Carlos Menem (1989-1999), cuando se intentó una política de seducción con los habitantes de las islas, hasta las de la actual gestión de los Kirchner que, además de apelar a cada instancia de los organismos internacionales, desató una álgida compulsa verbal con Londres.
Esta es la primera vez que en las Islas, por las que Argentina y Gran Bretaña estuvieron en guerra entre el 2 de abril y el 14 de junio de 1982, en la que murieron más de 600 soldados de ambos bandos, se realiza un referéndum, en donde 1650 habitantes estaban en condiciones de emitir su voto.
El gobierno argentino ya había indicado que no aceptará el resultado.





