El empresario de bares, discotecas y centros nocturnos, Aarón Salas Salas consideró que la problemática que enfrenta el centro nocturno “Babylon Club”, no es exactamente por el tipo de antro y menos por su género, y que si está funcionando es porque la autoridad lo autorizó en base a una ley.
Dijo que las sanciones las ejercen cuando no se cumplen con horarios o con ciertas reglas, y es así como podrían surgir los problemas para operar.
“San Luis Potosí ha crecido mucho en ese aspecto y quien tiene la razón es el público que decide a qué lugares asistir y en el caso de “Babylon Club”, es un lugar establecido que cuenta con las instalaciones adecuadas y no creo que el problema sea tanto por el giro”, reconoció.
Descartó que otros negocios de ese giro puedan enfrentar problemas por demandas de cierre, ya que tienen muchos años trabajando y cuentan con todos los requisitos solicitados por la ley para su funcionalidad.
El empresario consideró que en el caso del “Babylon Club”, su principal inconveniente radica en que se encuentra cerca de un plantel educativo, pero que si está funcionando es porque las autoridades emitieron el permiso después de valorar el lugar donde se ubicaría.
