A unas horas de la celebración de la Navidad, la Iglesia Católica local recordó que esta festividad no es para “ponerse borracho”, sino aprovechar este tiempo para estar con los seres amados.
Al respecto, Juan Jesús Priego Rivera, vocero del Arzobispado de San Luis Potosí, instó a la ciudadanía que festeja y decide ingerir bebidas embriagantes, que no salga a la calle e intente manejar un automotor.
“Hay gente de la que depende tu vida. Un error tuyo en el manejo puede ser causa de muerte de familias enteras (…) Hace unos días tuve la tristeza de oficiar el funeral de un niño de ocho años; un camión se les fue encima a la familia”, recordó.
Dijo que estar al volante de un automóvil aun en las condiciones normales es riesgoso, y si “no valoramos nuestra vida, bueno, está la vida de los demás”, juzgó.
Priego Rivera solicitó que “por amor al prójimo y por amor a Dios”, las personas sean conscientes y no manejen alcoholizadas.
En entrevista por separado, Jesús Carlos Cabrero Romero, arzobispo de la Arquidiócesis Potosina, criticó que “ahí está” el detrimento que se está haciendo en la realización de las posadas, es decir, que se incluya la ingesta de bebidas embriagantes en esa actividades de cercanía a Dios.
“Las posadas son un tiempo sumamente importante para la iglesia, porque son para evangelizar (…) Por eso hay que luchar (para evitar que haya alcohol), y esa es tarea de la iglesia: proponer para se fomente la fe”, expresó.
